The Pitt (2025) Crítica. La nueva serie médica de los guionistas de Urgencias es fantástica y absorbente
La sombra de ‘Urgencias‘, más de una década después de su final tras 16 años en antena, sigue siendo alargada. Tanto que en cuanto se supo de este proyecto desde los gestores del patrimonio de Michael Crichton (creador de la serie médica) no dudaron en interponer demanda por los supuestos parecidos.
No es para menos, ya que se ambienta en el servicio de urgencias de un hospital, está protagonizada por Noah Wyle, el mítico doctor John Carter, y cuenta con veteranos guionistas de aquella como R. Scott Gemmill de creador y John Wells de director. Sin embargo, basta con ver unos minutos para comprobar que ‘The Pitt‘ no se parece, ni quiere parecerse al galardonado drama médico.
Recién estrenada en Max con sus dos primeros episodios de 15 (de los cuales he podido ver 8), la serie narra en «tiempo real» (cada capítulo abarca una hora) un turno de urgencias en un hospital de Pittsburgh. Allí el dr. Robby deberá lidiar no solo con la nueva parrilla de residentes, también con las presiones de arriba para hacer el servicio eficiente.
Urgencias parsimoniosas
Eso sí, no os esperéis las intensas escenas rápidas que teníamos en ‘Urgencias’ en las que las camillas entran a todo trapo y uno de los médicos dice «al box 3». Sí, hay alguna urgencia de esas pero el mismo planteamiento de la serie hace que se diluya lo adrenalínico… los pacientes entran en un episodio y están unas cuantas horas rondando con los médicos saltando de uno a otro e intentando ver que todo evolucione bien.
Podríamos decir que ir al «Pitt» es lo más parecido que hay a ir a las urgencias de tu hospital local: sabes cuándo llegas a la sala de espera pero no cuándo te van a admitir; los médicos están sobresaturados y se ven entre el atender bien o el atender a muchos. Es un examen al sistema de atención médica estadounidense que se puede trasladar perfectamente al español o de otros países (con sus diferencias, claro).
Sin embargo, este realismo parece acabar ahí en lo que los casos (sin duda muchos sacados de titulares y cosas típicas) evolucionan algunos a diagnósticos raros o te topas con giros que, sin dejar de ser verosímiles, se notan ligeramente artificiosos por el bien del drama.
Desde luego no estoy hablando de que sea como ‘House‘ o ‘Anatomía de Grey‘ ya que, si bien no en formato, en el fondo estamos con un drama médico bastante clásico. Clásico pero que a su vez resulta innovador. Resulta extraño ver un género tan anclado a lo episódico, a los casos de la semana, lo procedimental, con este planteamiento.
Por otro lado, para mí el mayor pecado de la serie sea que, aun con un ritmo relativamente tranquilo al principio es un poco caótico hacerte con la decena de personajes que aparecen. Ya no digo los técnicos de ambulancia, que sirven casi de alivio cómico en lo que se dedican a apostar sobre cómo va a ir el día en cuanto a casos, también con los médicos que al principio no terminas de distinguir a los nuevos con los veteranos dentro de los residentes.
Esto es, simplemente, resultado de ese caos que se produce y que te absorbe desde el primer episodio dándote esa medicina que no sabías que necesitabas. Y es que, en definitiva, ‘The Pitt’ es un drama médico sólido, adictivo (qué pena que en Max se vayan a emitir semanales) y, también, con bastante corazón. Una estupenda serie que puede mirar cara a cara a las grandes del género.
En Espinof | Las series más esperadas de 2025
En Espinof | Las mejores series de médicos en streaming